En un giro inesperado, la esperada entrevista entre Donald Trump y Elon Musk en la red social X, anteriormente conocida como Twitter, se vio gravemente afectada por problemas técnicos que impidieron el acceso a muchos usuarios. Elon Musk, quien también es el dueño de la plataforma, atribuyó el caos a un ciberataque de tipo Ddos que saturó los servidores, creando un retraso de 40 minutos y complicaciones continuas durante la transmisión.
A pesar de los inconvenientes, Trump no escatimó en ofrecer una visión contundente de su plataforma política. En su discurso, el ex presidente arremetió contra el manejo actual de la inmigración en Estados Unidos, afirmando que bajo un gobierno demócrata, el país estaría "desbordado" con hasta 60 millones de nuevos inmigrantes, prometiendo una de las mayores deportaciones en la historia de la nación si regresa a la Casa Blanca.
La conversación también abordó temas internacionales, con Trump destacando su relación con líderes mundiales como Vladimir Putin y Xi Jinping. El republicano elogió la habilidad y la inteligencia de ambos presidentes, argumentando que mantener buenas relaciones con ellos es beneficioso para Estados Unidos. En cuanto a Irán, Trump expresó su confianza en que Teherán no lanzará un ataque, a pesar de las crecientes tensiones en la región.
Entre las declaraciones más polémicas, Trump elogió al presidente venezolano Nicolás Maduro, a quien describió como un líder eficaz que ha reducido la criminalidad en el país, a pesar de las críticas internacionales por violaciones a los derechos humanos en Venezuela. Esta alabanza contrasta fuertemente con la visión crítica de otros líderes internacionales y organismos de derechos humanos.
El ex mandatario también abordó su propuesta para la creación de un sistema de misiles similar al Cúpula de Hierro de Israel y su intención de cerrar el Departamento Federal de Educación, traspasando la responsabilidad a los estados. Además, mostró su apoyo a Tesla y su disposición para colaborar con una comisión de eficiencia gubernamental.
En cuanto a la vicepresidenta Kamala Harris, Trump la describió como una radical extrema, sugiriendo que su posible presidencia sería aún peor que la administración de Joe Biden, a quien ya había criticado severamente.
El equipo de Kamala Harris no tardó en responder, calificando a Trump y Musk como "ricos obsesionados consigo mismos" incapaces de gestionar una transmisión en vivo en 2024. Este intercambio de críticas refleja el creciente polarización y tensión en la política estadounidense, mientras los candidatos y sus apoyos luchan por captar la atención y el apoyo de los votantes.
(Foto: @elonmusk/x)