Con un partidazo Colombia se impuso 2-1 a Argentina en un emocionante duelo que capturó la atención de todos los aficionados del Metropolitano de Barranquilla. Mediante los goles de Yerson Mosquera y James Rodríguez, la selección colombiana no solo celebró una victoria, sino que también demostró su capacidad de superar adversidades en las Eliminatorias Sudamericanas.
Desde el primer pitazo, el calor agobiante de Barranquilla se convirtió en un aliado para Colombia. El equipo local, liderado por Rodríguez, tomó el control del juego y empezó a crear oportunidades. El primer golpe llegó a los 25 minutos cuando Rodríguez, con una precisión milimétrica, centró el balón para que Mosquera, con un potente cabezazo, venciera a Emiliano Martínez y abriera el marcador.
A pesar de la ventaja temprana, el partido se mantuvo intenso. Argentina intentó reagruparse y, en el inicio del segundo tiempo, logró igualar el marcador. Un error en la salida de Rodríguez permitió a Nicolás González recuperar y, con un remate certero, empatar el juego a los 48 minutos.
El empate no desalentó a Colombia, que volvió a apretar el acelerador. La presión dio frutos cuando, a los 58 minutos, un penalti a favor de Colombia fue revisado por el VAR y confirmado por el árbitro tras una falta de Nicolás Otamendi sobre Daniel Muñoz. James Rodríguez, con su experiencia y habilidad, transformó el penalti en gol, colocando a Colombia nuevamente por delante.
A partir de ese momento, el encuentro se tornó una batalla táctica. Argentina intensificó su búsqueda del empate, mientras que Colombia se mantuvo firme en defensa y aprovechó los espacios en la contra. La selección local logró contener los embates finales de los argentinos y se llevó una victoria que enciende la esperanza para el resto de las Eliminatorias.
Con este resultado, Colombia no solo suma tres puntos vitales, sino que también se afianza en la parte alta de la tabla, destacando su fortaleza y determinación en el camino hacia el Mundial. La tarde en Barranquilla será recordada como una demostración del espíritu competitivo y la calidad del fútbol colombiano.
(Foto: AFP)