Un trágico incidente marcó la noche del jueves en el estadio Atanasio Girardot, donde un partido entre Atlético Nacional y Junior se tornó violento. Cuando el local ganaba 2-0, se desataron enfrentamientos entre las barras de ambos equipos en la tribuna norte, dejando más de 25 personas heridas.
Ante la gravedad de los hechos, la Alcaldía de Medellín tomó medidas drásticas que impactarán el desarrollo de los partidos en este emblemático escenario deportivo. Se ha decidido cerrar el estadio por dos fechas para Atlético Nacional y, además, prohibir la presencia de hinchas visitantes durante el resto del año. Esta restricción también se aplicará para los partidos del Medellín.
Asimismo, se ha determinado que la tribuna norte permanecerá cerrada para Nacional durante cuatro encuentros. Las principales barras del club tampoco podrán ingresar banderas en sus próximas cuatro presentaciones de Liga, lo que refleja la preocupación por la seguridad en el recinto deportivo.
Se espera que la Dimayor también tome decisiones en relación con este lamentable evento, aunque se menciona que a Nacional no se le descontarán puntos por el resultado parcial del partido. Esta situación resalta la necesidad urgente de abordar la violencia en el fútbol colombiano y garantizar la seguridad de todos los asistentes a los eventos deportivos.